
La autoridad pretende sumar más verificadores en los próximos días para "normalizar" la operación en el puerto.
Al parecer, la aduana de Manzanillo ha empezado a tener acercamientos con los usuarios del puerto para atender el caos operativo que generaron las protestas de la semana pasada por parte de los oficiales de comercio exterior.
La Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos (Conatram), que aglutina mayormente a hombres-camión y pequeñas y medianas líneas de autotransporte, emitió un comunicado a sus asociados donde informa que ayer 19 de mayo se tuvo una reunión con actores portuarios y autoridades, entre ellos la aduana de Manzanillo.
“Nos han comentado que están esperando contar con hasta 20 verificadores para lograr mantener los volúmenes que traíamos antes de la contingencia y de ellos ya hay algunos laborando y otros se seguirán agregando en próximas horas y días para llegar a 20”, indicó la Conatram.
Ahí mismo aseguró que hoy (20 de mayo) “se buscará lograr cargar las 2,700 citas repartidas entre todas las terminales del puerto (zona norte y zona sur) y esperamos que para el miércoles volvamos a las 4,000 a las que veníamos cargando entre miércoles y viernes”.
De acuerdo con los datos oficiales, al puerto de Manzanillo ingresan diariamente poco más de cuatro mil unidades de autotransporte para recoger o descargar mercancías.
Una fuente cercana a la aduana de Manzanillo que solicitó el anonimato indicó a T21 que actualmente esta autoridad revisora está trabajando con apenas cinco verificadores, cuando en un día “normal” de operación se debería contar con al menos 25 verificadores distribuidos en diferentes horarios del día.
“Un verificador normalmente atiende 15 a 20 rojos por día, el problema es que hay muchas alertas de la Central de Investigación aduanera y eso implica trabajo administrativo porque tienen que hacer actas de ampliación, más aparte enviar correos de soporte de alertas; puede que no suban los reconocimientos, pero si suben las alertas es más trabajo y con el mismo personal”, aseguró la fuente.
La aduana de Manzanillo es la segunda con mayor nivel de recaudación de impuestos en el país, solo detrás de la de Nuevo Laredo, que es el mayor paso fronterizo de mercancías con Estados Unidos.
Mientras tanto, la Conatram ha adelantado también que el próximo 23 de mayo se tendrá una segunda reunión con las autoridades y los actores del puerto de Manzanillo, “para conocer los logros de esta semana”.
Los empleados de la aduana, en su mayoría oficiales de comercio exterior civiles, cerraron los accesos al puerto hasta en dos ocasiones durante la semana pasada, como protesta por supuestas malas condiciones laborales que padecen y despidos injustificados desde la llegada (15 de abril pasado) del capitán de navío Rodolfo Torres Chávez como titular de la aduana de Manzanillo.
Comercio exterior, en peligro
Esta mañana de martes Sergio Contreras, presidente ejecutivo del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce), se reunió con medios de comunicación donde indicó que durante los días más críticos en el puerto de Manzanillo se suspendieron entre tres mil y cuatro mil movimientos diarios de carga terrestre, lo que provocó pérdidas económicas que se estiman en cientos de millones de pesos diarios.
Más allá del impacto financiero directo, Contreras señaló la importancia del riesgo logístico que se generó por los retrasos en exportaciones e importaciones, afectando de forma inmediata a productos perecederos.
Esta situación no solo compromete la calidad de los bienes, sino que también conlleva penalizaciones contractuales, pues en muchos casos la responsabilidad recae sobre el exportador.
Por otra parte, las pequeñas y medianas empresas (pymes) resultaron particularmente vulnerables ante esta desestabilización, ya que muchas de ellas dependen directamente del flujo continuo de insumos importados y del cumplimiento puntual en sus cadenas de suministro.
El líder del Comce también alertó sobre los cuellos de botella generados por los bloqueos, ya que, al interrumpirse el movimiento de contenedores, se generan congestiones que complican aún más la recuperación operativa.
“Cuando se bloquea una fila de carga, ya sea de importación o exportación, se detiene todo. Es un reto logístico enorme”, explicó.
En este sentido, señaló que, aunque el conflicto fue atendido a tiempo, el episodio sirve como un llamado de atención.
FUENTE: https://t21.com.mx/aduana-de-manzanillo-opera-solo-con-5-verificadores-calculan-perdidas-millonarias-por-caos-operativo/